jueves, 22 de junio de 2017

Barça 2016-17 (III): el mediocampo

En el lejano mes de enero de 2004, la llegada de un ya veterano Edgar Davids, liberó a un canterano ya consolidado en el primer equipo, Xavi Hernández, para que desde el interior derecho pudiera liderar el juego blaugrana como motor primario de juego, y favorecer el juego preciosista de un Ronaldinho que hasta entonces era la única noticia positiva para el barcelonismo, todavía deprimido por la travesía del desierto del tardonuñismo y el gaspartismo.



Desde entonces, el mediocampo azulgrana ha sido el centro neurálgico de todo lo que sucedía en el Barcelona sobre el césped, sublimado por el triángulo guardoliano de Busquets-Xavi-Iniesta, siempre escoltados por Leo Messi desde la posición del falso nueve. Con ellos, llegaron un juego nunca antes visto acompañado de unos resultados desconocidos hasta la fecha. Se marchó Pep, la maldita enfermedad se llevó a Tito y aquella temporada de involución del Tata Martino desembocó en la llegada de Luis Enrique. Desde que llegó el asturiano, la preponderancia de un tridente de ataque devastador, hizo que, casi con cada partido que pasaba, el centro del campo fuera perdiendo peso en el juego blaugrana, hasta casi convertirse en un mero lugar de paso. Se pasó de que el juego llevara al gol a que el gol llevara al juego. El principio del fin.

Esta temporada, además del deterioro jerárquico del mediocampo dentro del equipo, la situación se vio agravada con la incorporación de un jugador cuya interpretación del juego no puede estar más alejada de la tradición azulgrana: André Gomes. El portugués, ha jugado más de 40 partidos, siendo un comodín habitual para Luis Enrique, pese a la clara inadaptación del jugador al equipo.

Ahora con la llegada de Valverde, esperemos volver a las fuentes, y para eso, necesitamos uno o, mejor, varios interiores posicionales de verdad. En este comienzo de mercato parece que van a por el "As de Oros" (Verratti) con todo; esperemos que no acabemos con un "Cuatro de bastos", porque ya están hablando los medios afines de sobrepoblación de mediocampistas, cuando lo relevante es la calidad, no la cantidad.

A continuación mi calificación individual de los mediocampistas:


Sergio Busquets: Aprobado

Cada pasito que el equipo se alejó del plan maestro, más sufría el de Badía. Muchos lo calificaron como una de las causas del pobre juego azulgrana en muchas fases de la temporada, cuando en realidad era un síntoma de hacia dónde nos encaminábamos.
Durante muchos partidos, se colocó como tercer central en la salida de balón (salida lavolpiana), pero esto no funcionó demasiado y además le alejaba de liderar la presión tras pérdida del equipo.
Corrió demasiado a campo abierto ante rivales más rápidos que él, y no pudo juntar al equipo suficientemente para poder ordenarse a través del balón, y con ello también estar colocado ante cualquier eventual pérdida.
Pero su importancia se midió el día que tuvo que ausentarse: en Turín. Mascherano le hizo tan bueno, que desde ese día pareció que subió el nivel. No sé si ocurrió ciertamente o fue una alucinación por la comparativa con el resto (mención especial para André Gomes en esto), pero en los últimos partidos hemos vuelto a ver a un Sergio con confianza y liderando el centro del campo.



Andrés Iniesta: Aprobado

Se ha pasado la temporada siendo dosificado por Luis Enrique para jugar siempre con la selección. Su ausencia en muchos partidos ha sido determinante para perder absolutamente el control del partido.
Bien es cierto que ha tenido algunas pequeñas lesiones, que no le han permitido llegar a los 40 partidos entre todas las competiciones. En cualquier caso, su mera presencia, su magisterio futbolístico, mejoraba sustancialmente el juego del equipo. Sin embargo su intermitencia en las apariciones no han dejado ver el mejor Iniesta de manera continuada.


Ivan Rakitic: Aprobado

El croata empezó bien la temporada, incluso marcando goles importantes en San Mamés y ante el Atlético de Madrid. Sin embargo, entró en un bache incomprensible, perdiendo hasta la titularidad durante meses, incluso llegando a rumorearse que algo pasaba con Luis Enrique.
En los últimos meses fue recobrando el protagonismo, y volviendo a hacer goles como el del Bernabéu, para cerrar la temporada en el nivel que se le supone.
Con el cambio de entrenador, puede ver peligrar su status, e incluso su puesto en la plantilla, ya que podría llegar a ser una de las pocas alternativas para que el club haga caja en el mercado.

Rafinha: Aprobado

El que debería haber sido el año de su consagración tras la desgraciada lesión del año pasado, se ha convertido en un quiero y no puedo, sobre todo por culpa de las lesiones, pequeñas y no tanto. Sin embargo, es quizás el único de la segunda unidad que ha dado un rendimiento al equipo.
Su impacto goleador fue más importante que en el juego, casi irrelevante. Su mejor tramo fue aprovechando el cambio a 1-3-4-3, donde a la derecha y con su despliegue dio un rendimiento más que notable hasta que de nuevo, una última lesión, le ha apartado hasta la próxima temporada.
También se rumorea que puede salir si llegara una oferta interesante que permitiera ayudar a reconstruir el equipo para Valverde.

André Gomes: Suspenso

Su fichaje, apoyado en un supuesto "robo" al Madrid, fue muy vitoreado por la prensa del regimen, aunque algunos, por una cuestión de perfil, que no de calidad, ya veíamos que chirriaba demasiado.
Ha sido el protegido de Luis Enrique, con 46 apariciones entre todas las competiciones. Ha jugado en todas las posiciones del mediocampo, por banda derecha de ataque e incluso en la final de Copa de lateral derecho.
Su falta de conocimiento del juego de posición, recibiendo siempre mal perfilado, confundiendo cuando alejarse y cuando acercarse al balón, ha hecho que se le vieran las costuras demasiadas veces.
Enseguida fue blanco de las iras del Camp Nou, y esto además le ha retraído en mostrar algunas de sus virtudes como la conducción, la llegada a gol y el disparo. Por momentos, la confianza ciega que le profesaba Luis Enrique le ha perjudicado más que cualquier otra cosa.
El hecho de haber sido un fichaje de futuro, caro y de hace un año, por lo que le queda mucho por amortizar, dificultan su salida, aunque personalmente, yo me desharía de él si llega cualquier oferta por encima de los 30 millones.


Arda Turan: Suspenso

Lo coloco como mediocampista porque la Junta Gestora lo fichó, supuestamente por requerimiento de Luis Enrique, para que fuera interior en el equipo.
Comenzó la temporada con algunas actuaciones convincentes en banda izquierda de ataque, ante la ausencia de Neymar tras los Juegos Olímpicos, y su posterior tardía pre-temporada.
Hasta el mes de noviembre, parecía que podría ser recuperado para la causa. Pero con la absurda falta que hizo en el último minuto contra el Madrid, que costó el gol del empate, pareció entrar en un agujero negro de confianza y juego que le ha llevado hasta final de temporada.
La segunda parte de su temporada ha sido nefasta, llena de molestias que sospechosamente le apartaban de las convocatorias, y presencias más testimoniales que otra cosa, que cada vez confirmaban los presagios de que ya se trata más de un ex-jugador, que cualquier otra cosa.
Su desorbitada ficha y su contrato hasta 2020, dificultarán su salida, pero es una necesidad imperiosa para el club.
Personalmente una de las grandes decepciones de los últimos años. Me parece un grandioso jugador, que no ha tenido el carácter necesario para triunfar en un equipo en el que podría haber marcado una época.

Denis Suárez: Suspenso

Su regreso era una de las mejores noticias del verano pasado. Comenzó asociándose muy bien con Messi en los primeros partidos de la temporada. El genio le había dado el visto bueno: fantástico comienzo.
Sin embargo, no entiendo por qué, dejó de contar prácticamente para Luis Enrique en las rotaciones, más allá de apariciones testimoniales, en las que Denis hacía de la irrelevancia en sus aportaciones su seña de identidad.
Temporada muy decepcionante, que espero sirva de palanca para poder darnos todo el enorme potencial que atesora. Todavía debe definirse como jugador, ya que no es ni un interior al uso, ni un hombre de banda en ataque, aunque puede asumir ambos roles sin ninguna contraindicación. Espero que el año próximo explote con la llegada de Valverde, un hombre que seguro que tiene su desarrollo como uno de sus capítulos relevantes.

2 comentarios:

  1. Hola de nuevo. Comparto todas tus notas salvo en dos casos: Busquets aunque algo irregular cada año me parece más maduro en su puesto y claramente imprescindible. Y Rafinha, con un comienzo de temporada no sólo goleador si no también a un nivel muy alto, posteriormente truncado por su lesión. En mi opinión se debería mantener este pequeño diamante todavía en bruto, y si sale como comentas, ¡que vuelva a mi Celtiña por favor! Por eso yo le pondría un notable en la 1ª evaluación, un "no calificado" en la 2ª evaluación y un bien en la 3ª, por lo que estaría entre el bien y el notable. Un saludo

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  2. Busquets a mi me parece el gran damnificado de la era Luis Enrique, y bastante ha hecho el hombre. Podría ser un notable, fácilmente, pero ha salido muchas veces en las fotos el pobrecillo.
    Rafinha no me desagradaría que se quedara, desde luego. Lo que no podemos es venderlo a la baja. 50M€ mínimo. Eres un profe muy generoso,jajaja. ;-)

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